Los Versículos que cambiaron mi vida
Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.
Entendí la necesidad de una relación íntima, de hablarle y escucharle, se que a veces pareciera que no pasara nada pero por Fe cada día hay que cultivar la relación, y para eso se necesita tiempo y privacidad.
Me buscarán y me encontrarán, cuando me busquen de todo corazón.
Equivocadamente muchos creen que para llegar al encuentro con Dios hay que estar limpios o libres de pecado, el pecado nos hace pensar así: no somos dignos, sin embargo una y otra vez Jesús nos invita acércanos tal y como somos, lo único que requiere ese encuentro es una actitud del corazón, la necesidad de encontrarlo, una anhelo que viene desde adentro.
Mas tú amas la verdad en lo íntimo del ser, y en lo secreto me enseñas la sabiduría.
Deléitate en el Señor, y él te concederá los deseos de tu corazón.
Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús.
Gracias a este versículos reconozco día a día el gozo que habita en mi que sobrepasa cualquier situación, me hace crecer más en la fe por que no estoy condicionada a lo que pasa o a mis emociones, sino enfocada en mis convicciones, cuando vives así, no ves problemas lo que vez es una hermosa oportunidad para que Dios se glorifique.
No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.
Por lo que Jesús, dándose cuenta de que iban a venir y llevárselo por la fuerza para hacerle rey, se retiró otra vez al monte El solo.
Clama a mí y te responderé, y te daré a conocer cosas grandes y ocultas que tú no sabes.
Vivimos por fe, no por vista.
La Fe no es para vivir fuera de la realidad, la Fe es para declarar que esa realidad nunca estará por encima de la verdad del plan de Dios, es así como pase lo que pase, siempre espero lo mejor, no por lo que estoy viendo sino por en quien yo creo.
Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración, y lo obtendrán.
Pero que pida con fe, sin dudar, porque quien duda es como las olas del mar, agitadas y llevadas de un lado a otro por el viento.
¿Cómo que si puedo? Para el que cree, todo es posible.
Cada vez que lo leo, el Señor me recuerda que yo si puedo y que en vez de preguntarme con dudas si puedo hacerlo, me llene de la seguridad que El me da y la preguntarme: cómo puedo hacerlo? Que necesito para comenzar?
Si ustedes creen, recibirán todo lo que pidan en oración.
Puedes irte —le dijo Jesús—; tu fe te ha sanado. Al momento recobró la vista y empezó a seguir a Jesús por el camino.
-Hija, tu fe te ha sanado! —le dijo Jesús—. Vete en paz y queda sana de tu aflicción.
Este es el día en que el Señor actuó;
regocijémonos y alegrémonos en él.
Con este versículo me levanto todos los días, reconozco que Dios hace nuevo un día para mi, para disfrutarlo y aprovecharlo. Lo leo y le respondo: no te arrepentirás te haberme dado esta oportunidad ! Gracias !
Me someto a Dios, resisto al diablo y El huirá.
Este versículo me da fuerza para vencer las tentaciones, y me genera voluntad para seguir a Jesús en cada situación.
Donde abunda el pecado, rebosa la Gracia.